Image courtesy of Scatti Spontanei

"Llevo sentimientos de gratitud por toda la experiencia vivida a lo largo de los tres años de acompañar el equipo directivo y la vida de la UISG desde la presidencia. Gratitud ante todo porque he podido constatar, “de cerca”, la vitalidad de la vida religiosa femenina y su extraordinaria presencia en los capilares de la vida de la Iglesia, hasta los confines del mundo, en variedad de las misiones y servicios. Lo que uno de los proyectos de la UISG expresa “es mi hermana”, me ha acompañado durante este tiempo. Donde sea que hubiera encontrado a una hermana, sentía cercanía y acogida profunda, aunque ella no supiera siquiera quién está a su lado.

Años muy intensos marcados por la COVID. En este contexto, cuando la fragilidad de la humanidad y también de la vida religiosa ha emergido con tanta fuerza, poder acompañarnos mutuamente desde las constelaciones de la UISG, en las reuniones de discernimiento, formación y oraciones via Zoom, en proximidad a las superioras generales, ha fortalecido la interconectividad. Ha permitido no solamente vivir como posibilidad  el hecho de contar unas con otras, sino que ha sido una experiencia verdadera, de poner en común las vulnerabilidades pero también la fuerza resiliente y misionera de la vida religiosa femenina. El carisma de claretianas, me ha sostenido en este acompañamiento.

El Equipo directivo ha sido una bendición de Dios de colaboración: Franca, Licia, Roxanne, Anabela, Josephine, Monica Joseph, Monika Regina, Luigina, y las dos Mary, junto con la siempre disponible Hna. Patricia Murray, Secretaria ejecutiva; nos hemos escuchado, aprendiendo unas de otras, complementando, discerniendo, compartiendo intuiciones y experiencias. Ha sido una labor de tejer relaciones de hermanas y de vivir la misión corresponsablemente.

Han sido preciosos los pasos compartidos con la CIVCSVA y nuestros hermanos de la USG, pues además de la pandemia nos unían las llamadas de la Iglesia, espacialmente en Fratelli Tutti, en la apertura del Sinodo 2021-2023 y en la colaboración de la cultura del cuidado y protección de los vulnerables. La pluridimensional apertura y alcance de la UISG es fruto de un camino que se nos ha entregado, que hemos continuado y queda por continuar, como esta comunión de diversidad de los carismas, estilos, historias, realidades culturales y eclesiales, en búsqueda de lo que El Espíritu dice a la Iglesia, puestas al servicio de su misión: anunciar en tantos modos  el Evangelio de Jesus."